En una primera etapa, la medida aplicará solo a cédulas de identidad de ciudadanos chilenos, vencidas en 2020 y 2021, extendiéndose su vigencia hasta el 31 de diciembre de este año.
Lo anterior, beneficiará a más de 2.1 millones de personas que se encuentran con su carnet caducado, y comenzará a regir una vez que el decreto se publique en el Diario Oficial.